Felices fiestas y esas cosas a todos ;)

7.- La adquisición de un original por parte de un coleccionista no incluye los derechos de publicación, solo la obra física, salvo que se estipule de alguna forma. Por lo cual el autor puede hacer con ello lo que le venga en gana, publicándolo cuando quiera.
6.- Un plot es un guión resumido, se suele usar en los cómics de superhéroes pero algunos guionistas europeos también se han aficionado a su uso, en el se describe lo que pasa en las paginas sin marcar número de viñetas ni lo que sucede exactamente en cada paginas. Así, en un solo párrafo se puede explicar lo que pasa en una pelea de varias páginas. Así la narración y el tempo de la narración queda completamente en manos del dibujante (a su riesgo y suerte). A lo mejor, el “guión” de una página de 9 viñetas, de esta forma, sería “el protagonista ve como el malo roba un coche y huye”.
5.-Un guión técnico es un guión completo, más o menos detallado (Alan Moore suele escribir un folio por viñeta) en el que se establece el tipo de plano y lo que sucede dentro de la viñeta, marcando el número de viñetas que hay por pagina.
4.- Cuando una editorial publica un cómic, adquiere los derechos de reproducción de esa obra durante el tiempo que esté estipulado en el contrato, prorrogable o no. En ningún momento adquiere los originales.
3.- El porcentaje que suelen quedarse las distribuidoras acostumbra a ser un 50% por ciento del precio de portada del cómic, en ese porcentaje está incluida la comisión del librero o quiosquero. En algunos casos, como grandes superficies, la cifra asciende a un 60 % ya que las grandes superficies piden más margen de beneficio para sus descuentos y ofertas.
2.- Las editoriales de cómics norteamericanas suelen tener dividido ya el precio por página, asignando una cantidad fija para guión, dibujo, tinta y demás.
1. – Un guionista suele cobrar un 30 % de lo que se cobra por la obra, si el cómic es en blanco y negro y un 25 % si el cómic es a color. Los precios pueden variar, pero suelen oscilar entre estos porcentajes. Cualquier guionista que pretenda cobrar un 50 % o más que el dibujante, debería ser apalizado públicamente o llenado de brea y plumas y pasearlo por algún salón del cómic de esa guisa. A no ser que con solo incluir su nombre en portada, haga que ese tebeo venda millones solo por eso (y aun así). Otro tema aparte son los royalties, de los cuales se habla en otro punto.